Curiosamente es cuando modificamos nuestra rutina que se abre el espacio para construir un nuevo hábito. Fue así como empezó mi propio hábito de meditar en 2007. Recién había llegado de un paseo demasiado largo en bici (que no es mi costumbre) e instintivamente me senté en vajrasana (hincada), porque así se sentía bien en mis piernas. En tal quietud, sentí como la energía en mi cuerpo, que se había activado con la pedaleada, ahora resaltaba en primer plano para mi. Fue una sensación de desbloqueo, de energía que corría pareja y consistentemente en todo mi cuerpo. Y ahí me quedé, y me gustó, y decidí hacer esto diario (obvio sin la bici), al menos por algunos minutitos. Mi cuerpo ya lo había conocido y era feliz de regresar ahí. Al día de hoy, sigo re visitando, día a día, ese lugar tan personal y esencial que reside en mi…
Hoy te invito a descubrir tu propio lugarcito. Te paso un ejercicio muy simple (probado por mi) que quizá sirva de entrenamiento mental para solo estar.
Hay un concepto en yoga que se llama eka grata y significa “atención en un solo objeto”. Este es el principio de la concentración, dharana, que posteriormente nos llevará al estado meditativo, dhyana. De hecho, cuando practicamos pranayama (control de la respiración) ejercemos una especie de eka grata, solo por el hecho de estar observando la respiración.
Así es que me encantaría guiarte hacia eka grata mediante tu respiración y de ahí pasará lo que pasará. Por favor aborda el ejercicio sin expectativa alguna, sólo a manera de exploración. Ese es el principio de entrenar a la mente a qué no se anticipe y sólo acompañe, como un gran testigo.
Aquí está:
- Siéntate cómodamente en una silla o en el piso en sukhasana (piernas cruzadas) con un poco de altura en tu base para alinear tu columna. Otra opción es sentarte en vajrasana (hincado), o bien, en sobre una silla. De preferencia, no te recargues, pero si los músculos de tu espalda aún son débiles, lo puedes hacer. La idea es estar lo más cómodo posible.
- Cierra tus ojos y comienza por escanear tu cuerpo rápidamente de pies a cabeza, detectando si hay algún lugar tenso, aunque sea mínimamente, para conscientemente relajarlo, hasta que sientas todo tu cuerpo lo más asentado posible.
- Presta atención al flujo de tu respiración, sin cambiar nada, sólo dejándola ser. Cuando tú elijas, comienza a contar 10 exhalaciones, cada vez que sucedan. Nota: mentalmente di “uno” al final de tu primera exhalación, “dos” al final de la segunda, y así sucesivamente. La idea es tener la paciencia suficiente de observar completo el ciclo de exhalación antes de contarlo.
- Después de contar las 10 exhalaciones, regresa a sólo observar tu respiración natural.
- Repite el ejercicio una o dos veces más, y al final solo quédate observando tu respiración natural y en el momento que sientas adecuado, también suelta esa atención y sólo quédate ahí.
El ejercicio suena simple, pero tiene su reto. Es posible que mientras cuentas exhalaciones, tu mente se vaya a otro lado. Si esto sucede regresarla gentilmente a lo que estabas haciendo. No te recrimines, recuerda que el ejercicio es meramente explorativo, como toda meditación…
Trata de hacer esto todos los días, de preferencia por la mañana. Te tomará de 5 a 10 minutos. Toma nota de tus descubrimientos y úsalos para conocer tu proceso a lo largo del tiempo.
Recuerda, el viaje hacia la meditación es completamente tuyo y único para ti. Toma este ejercicio como mera herramienta, pero más importante, confía en tu propio proceso. Que cualquier forma que tome tu meditación sea un resguardo para ti…
Namasté,
Miriam
Autor: Miriam Hamui
Miriam practica yoga desde el 2001 y enseña desde el 2008. También es educadora somática certificada por la escuela de Body Mind Movement. Ella combina sensibilidad y experiencia para guiar a sus alumnos hacia la práctica introspectiva y el movimiento consiente. De su cuerpo nace su escritura, que a su vez, inspira de regreso a su enseñanza. Conoce sus clases, eventos y libros publicados en www.miriamyoga.com
Muchas gracias MIRIAM !!!
Estoy buscando mi manera para meditar y tu mail me ha caído del cielo !!!
Un abrazo fuerte para ti y todas las compis de yoga en México !!
Infinitas gracias por compartir Miriam! Namaste!
Después de experimentar este ejercicio de meditación guiada, debo decir que ha sido una experiencia verdaderamente transformadora. Me senté cómodamente, cerré mis ojos y seguí el flujo de mi respiración, permitiéndome a mí mismo estar presente en el momento. Contar las exhalaciones fue una técnica sorprendentemente efectiva para mantener mi concentración, incluso cuando mi mente empezaba a divagar. A pesar de los desafíos iniciales, la paciencia y la persistencia han demostrado ser la clave. Ahora, noto una mayor calma y conciencia de mi propio cuerpo y mente. Este ejercicio me ha permitido comprender mejor mi proceso de meditación personal, y estoy emocionado de seguir explorando y profundizando en él. Realmente creo que la meditación es un viaje personal, y esta herramienta ha sido un excelente punto de partida. Namasté.